Julio: What Do You Do All Day? de Autocamper.

Autocamper es una banda de Manchester que rompe con los clichés del sonido post-punk dominante en su ciudad, apostando por un pop melódico y emocional que se siente fresco sin necesidad de sonar moderno por obligación. En su álbum debut, grabado en Glasgow con producción de Chris McCory (Catholic Action), el grupo evoluciona desde sus inicios de "bedroom pop" hacia un sonido más elaborado, sin perder la honestidad y sencillez que marcaban sus primeros lanzamientos.

El grupo está liderado vocalmente por Jack Harkins y Niamh Purtill, quienes alternan y combinan sus voces con una química muy natural. La de Jack recuerda a un Calvin Johnson británico, con un acento más del norte de Inglaterra, mientras que Niamh aporta un tono suave, casi susurrado, que contrasta y complementa. Esta dinámica genera una calidez muy particular en el disco, que conecta tanto con el sunshine pop de los años 60 como con la melancolía del indie pop ochentero.

Autocamper destacan por su habilidad para componer melodías memorables que transmiten emoción sin caer en el sentimentalismo. Su música refleja una comprensión profunda de la historia del pop independiente, desde los sellos neozelandeses como Flying Nun hasta el catálogo de Sarah Records, pasando por referencias como The Pastels, Felt o The Field Mice. A la vez, hay guiños al pop barroco y armonioso de Curt Boetcher o Sandy Salisbury.

El álbum está lleno de detalles que enriquecen la experiencia: la canción "Map Like A Leaf" cuenta con la colaboración del flautista Tom Crossley (de The Pastels), y en "Dogsitting", el órgano de Niamh recuerda a los arreglos de teclado de Martin Duffy en la etapa media de Felt. La sección rítmica, formada por Harry Williams y Arthur Robinson, aporta solidez y dinamismo, moviéndose entre la precisión de The Feelies y el groove juvenil de la Motown.

Lo que hace especial a Autocamper es su capacidad para capturar la belleza de lo cotidiano. Sus canciones convierten escenas comunes —resacas, peleas de pareja, días grises— en pequeñas postales de ternura, duda y esperanza. Lejos de las etiquetas de "twee" o "anorak", y completamente al margen del indie de escaparate o el pop corporativo, la banda apuesta por una sencillez real y sin artificios. Su música es pop en el mejor sentido: cercana, emotiva y hecha con el corazón. Es esta autenticidad lo que los diferencia y los convierte en una propuesta valiosa dentro del panorama actual.